miércoles, 26 de mayo de 2010

Una mierda de trabajo


La muerte nos sigue el olor, nos asecha, nos busca, y siempre nos encuentra. Que más sano que asumir que nos encontrara, en algún lugar más trecho o bien trecho… ¿que más da? ¿Qué más socialista que ella? la pelada, la que no le importa tu posición, tu dinero, tus autos, tus títulos, tus viajes y tus terrenos, para ella sólo eres su trabajo. Que mierda de trabajo el de ella. Más no debería importarnos la muerte conocida y creada por el ser humano, como al árbol no le importa el hierro. Me importa la vida… haaaa… pero sin vida no excite la muerte y sin muerte no tiene sentido la vida. La brevedad, la soledad, que sabrosas sensaciones, nadie puede irse de la mano con la muerte sin haber sentido esas cosas. Que fascinante es la muerte… que ser más interesante. Para mi merece todo mi respeto, pero no mi miedo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario